Tome Pin y haga Pun!
Las bebidas energéticas estan inundando el mercado y cada vez salen mas bebidas. Ahora uno puede ir a una tienda y decir: Deme una bebida que me dé energía por favor.
Hace menos de 20 años, las bebidas energéticas no existían y ahora son tan comunes como las gaseosas.
Red Bull, Pit Bull, Blue Jeans, Black Jeans, ciclon, etc. al parecer tienen que llamarse como un toro o como una prenda de vestir o un desastre natural.
De cualquier manera desde que se inventaron estas bebidas, la gente ha ido pensando que mas podría ser bueno para combinar con estas bebidas hasta que alguien la metió en su trago. Empezó con Vodka, y cuando se hizo famoso, lo mezclaron con ron y ahora, se puede mezclar la bebida cn casi cualquier tipo de trago, para acelerar el ritmo cardiaco e incrementar las posibilidades de una disfuncionalidad en el corazón, así como de una inminente taquicardia.
En Japon estan elaborando bebidas energéticas a base de un néctar existente en la saliva de la larva de avispón que asegura incrementar el rendimiento físico. Aún no se ha expandido su consumo a los países occidentales, pero parece ser una buena opción frente al cocktel de cafeína (y otros elementos que terminan en INA, Taurina, niacina, vitaminas) que vienen a ser las mencionadas bebidas energéticas actuales.
Ahora, es sólo cuestión de tiempo para que los japoneses empiecen a producir y a desarrollar su industria para la exportación y para que a algún imberve se le ocurra mezclarla con trago a ver que pasa.
Al parecer el alcohol no es suficiente y las bebidas energéticas por si mismas tampoco, que mejor idea que disfrutar un ron de poder para emborracharse pero conservando energías de tal forma que sea un borracho poderoso y lleno de energías.
De cualquier forma, el punto aca no existe, ya que este comentario es tan superfluo como los consumidores del brebaje. Esto no es una opinión, es simplemente un recordatorio y una ilustración experimental del comportamiento del ser humano y su imaginación para enfrentar nuevos usos, nuevas necesidades y para crear ocurrencias frente a nuevos inventos, tecnologías y demas, aunque estas sean autodestructivas.
Hace menos de 20 años, las bebidas energéticas no existían y ahora son tan comunes como las gaseosas.
Red Bull, Pit Bull, Blue Jeans, Black Jeans, ciclon, etc. al parecer tienen que llamarse como un toro o como una prenda de vestir o un desastre natural.
De cualquier manera desde que se inventaron estas bebidas, la gente ha ido pensando que mas podría ser bueno para combinar con estas bebidas hasta que alguien la metió en su trago. Empezó con Vodka, y cuando se hizo famoso, lo mezclaron con ron y ahora, se puede mezclar la bebida cn casi cualquier tipo de trago, para acelerar el ritmo cardiaco e incrementar las posibilidades de una disfuncionalidad en el corazón, así como de una inminente taquicardia.
En Japon estan elaborando bebidas energéticas a base de un néctar existente en la saliva de la larva de avispón que asegura incrementar el rendimiento físico. Aún no se ha expandido su consumo a los países occidentales, pero parece ser una buena opción frente al cocktel de cafeína (y otros elementos que terminan en INA, Taurina, niacina, vitaminas) que vienen a ser las mencionadas bebidas energéticas actuales.
Ahora, es sólo cuestión de tiempo para que los japoneses empiecen a producir y a desarrollar su industria para la exportación y para que a algún imberve se le ocurra mezclarla con trago a ver que pasa.
Al parecer el alcohol no es suficiente y las bebidas energéticas por si mismas tampoco, que mejor idea que disfrutar un ron de poder para emborracharse pero conservando energías de tal forma que sea un borracho poderoso y lleno de energías.
De cualquier forma, el punto aca no existe, ya que este comentario es tan superfluo como los consumidores del brebaje. Esto no es una opinión, es simplemente un recordatorio y una ilustración experimental del comportamiento del ser humano y su imaginación para enfrentar nuevos usos, nuevas necesidades y para crear ocurrencias frente a nuevos inventos, tecnologías y demas, aunque estas sean autodestructivas.
